Como había puesto en mi entrada anterior, estaba ansiosa -desesperada- por terminar mi lectura actual. Creo que había mencionado que era para el colegio, pero que dentro de todo no estaba tan mal.Bien, mi lectura de los últimos nueve días mas largos de mi vida fue: Santa Evita de Tomas Eloy Martinez.
Con toda mi sinceridad, aunque es algo mas que imaginable, no es la lectura que yo hubiese elegido para hacer en mis realmente cortas vacaciones de invierno, pero he tenido que hacerla como tarea para la clase de historia. Voy a confesar también, que comparado con los libros que nos da la profesora de lengua este era mucho mejor.
Hablemos un poco del libro...
Santa Evita no es una biografía de Eva Perón (figura política Argentina), es una novela sobre Eva Perón. No quiero meterme mucho en los temas políticos que esta podría llegar a mencionar ya que no se, ni me interesa la política. Entonces, independientemente de cualquier aspecto político e histórico he leído la novela como una simple ficción. Me ha gustado.
A ver, si sacamos la historia del contexto real, y nos olvidamos que Eva Perón existió y que era de verdad, la historia no suena tan mal. Tiene momentos muy atrapantes. El autor sabe llevarte en la historia hasta que estas adentro, una vez allí (por lo menos yo) te crees que hay algo extraño, una maldición. Me ha encantado como ha relatado lo que vivía cada personaje y les daba vida. Es muy bueno. Ahora... el problema surgió cuando termine el libro y me recordé a mi misma que todo eso paso en realidad (seguramente) y a personas reales... DIOS MIO.
Es que es demasiado... ¿fuerte?... Es que no me cabe en la cabeza que la gente sea capaz de manipular como un mueble a un cuerpo, sin importar de quien sea. El problema es que sea real.
Me ha gustado demasiado la forma de escribir de este autor (una pena que creo solo escribe novelas políticas). Solo puedo quejarme del hecho que tiene momentos demasiado densos, calculen que he demorado nueve días, es muchísimo. Pero una vez que pasas los momentos eternos el libro mejora.
Le doy a Santa Evita tres estrellas de cinco. La primera estrella por que aunque me ha gustado no me ha fascinado, y tengo que restarle otra mas por los momentos de lentitud.
Si te gustan las novelas sobre hechos históricos verdaderos, pero que no sean demasiado biográficas, bueno... puedes leer Santa Evita.
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